martes, 27 de marzo de 2012

Divididos en Morón: Todo está vivo a pesar del dolor

Ante más de 50 mil personas, la aplanadora del rock se presentó, el domingo pasado, en el predio de la Casa de la Memoria y la Vida, en el marco de la conmemoración del 36° aniversario del Golpe de Estado.


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“Este lugar que ha sido un centro de detención, de muerte y desaparición, y hoy es todo lo contrario. Ayer pase por la ESMA, mire hacia adentro y en vez de ver a un chabón con un fusil, vi a un pibe con un estuche de guitarra y dije: ‘Adelante’. Vamos a limpiar este lugar todos los años, todo el tiempo que se pueda y tenemos que tener mucha memoria para que no vuelva a suceder”, reflexionó Ricardo Mollo acerca de la transformación de los centros clandestinos, que funcionaron durante la última dictadura, en espacios dedicados a recuperar la memoria colectiva.

Desde que Divididos desembarcó en el escenario (y a lo largo de todo el show), el ex guitarrista de Sumo no escatimó en palabras para manifestar su opinión en torno a la fecha que se estaba rememorando. “Buenas noches. Gracias por estar acá. Hoy es 24, mañana también y todos los días deben ser 24 porque siempre tenemos que tener presente esta fecha para tener memoria”, saludó extendidamente Mollo, y arremetió nuevamente: “Como dijo Rafael Correa que no nos roben la alegría”, para comenzar con la potencia característica del grupo con el clásico “Paraguay”, al que se le pegaron “Hombre en U” y “Salir a asustar”. Entre el grito de los argentinos, se impuso la elocuencia del cantante: “¡Estamos en casa!”.

Durante el concierto, Mollo - como siempre atento a lo que ocurre a su alrededor - interactuó con el público en respuesta a sus cánticos. Cuando coreaban “El que no salta es militar”, el guitarrista agregó: “También puede ser un civil, porque tuvieron muchísima participación. No olvidemos que los militares fueron los títeres de los grupos económicos, que todavía están”. Luego la gente comenzó a cantar “El que no salta es un ingles”, y R.M. comentó: “Justo íbamos a hacer un tema en ingles. ¿Que hacemos ahora? ¿No lo tocamos?”, e invitó a la reflexión: “Tenemos que separar el arte de los políticos, del poder. Los ingleses que se ocupan de la parte estratégica, de tener una isla en cada punto de Latinoamérica, como son conquistadores necesitan tener todo controlado. Es parte de la gran paranoia”. Pese al rechazo anglosajón se sumó Diego Florentin (guitarra) para interpretar “Sisters”, iniciando un breve bloque acústico y emotivo que se completó con “Spaghetti del rock” y “Par mil”.

Además de la dialéctica, Mollo deleitó con su habitual destreza con la viola y con su garganta privilegiada, que tuvo como punto cumbre “El arriero” (tema dedicado a la memoria de Rodolfo Walsh a 35 años de su desaparición). Mientras que Diego Arnedo dio cátedra desde las cuatro cuerdas de su bajo, y pese a que algunos que estaban en el fondo no pudieron disfrutar de su talento, los que estaban adelante pueden dar fe de ello. La tercera pieza que conforma el engranaje del demoledor power trío es el enérgico Catriel Ciavarella, quien dio muestra de sus dotes de joven pulpo durante todo el show.

Sobre el final apareció la Aplanadora en su esplendor con una sucesión de temas insuperables como “Paisano de Hurlingham”, “Sucio y desprolijo”, “El 38”, “Rasputin” y “Aladelta”. Como si fuera poco una gema de Sumo: “Next Week” (con broma incluida: "Un nesquik y nos vamos a dormir") culminó un set corto para los estándares de Divididos, pero con la contundencia que los caracteriza. Se podría analizar la lista de temas, el sonido o la duración del concierto, pero lo primordial es que más de 50 mil personas se congregaron para conmemorar una fecha clave en la historia del país, que nos permite comprender nuestro presente y mirar hacia adelante porque como manifestaba el lema de la puesta en escena: “El futuro habita en la memoria”.

“Tenemos 30 mil motivos para seguir luchando”


Previo a la actuación de Divididos se llevó a cabo el acto central que contó con la presencia del intendente de Morón, el diputado nacional Martín Sabbatella y referentes de organismos de derechos humanos. El intendente Lucas Ghi fue el orador y expresó: “El mejor homenaje que podemos hacerle a los desaparecidos, a las madres, a las abuelas, a los hijos, a todas las víctimas, es tomar sus banderas, construir con su entrega, vivir con su generosidad, soñar con sus ideales, sentir con su pasión, gozar con su intensidad, actuar con su compromiso, luchar con su dignidad. Sólo así mantendremos la esperanza viva de una sociedad mejor. Si tenemos memoria, tenemos futuro y tenemos 30 mil motivos para seguir luchando”.

La jornada del domingo había comenzado a las 14 con diversas actividades entre las que se destacan la muestra fotográfica “Ausencias” de Gustavo Germano, que rescata y reproduce imágenes de álbumes familiares tomadas antes y posterior al Golpe de 1976, marcando la ausencia de aquellos que ya no están. El taller ofrecido por la Dirección de Políticas de Género que tuvo como temática central “La Trata de blancas”. La actuación del quinteto de jazz Ricardo Pellican, que emprendió el camino de los más exquisitos sonidos a través de los instrumentos de cada uno de sus integrantes. El espectáculo de acrobacia aérea “Memoria en el Aire”, en el que artistas - colgados de arneses y telas - realizaron diferentes destrezas sobre una pantalla con un fondo de imágenes alusivas a la época de la dictadura.

VIDEOS:
- Amapola del 66
- Sisters
- El Arriero 

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