Durante el pasado fin de semana la ciudad de Haedo fue sede de la exposición “Rayo Cabayo”, que reunió un atractivo cruce de artes plásticas, video y música con los principales referentes de la zona.
Galería de fotos
Cuando corría el año 2000 en el Oeste surgió una movida artística que contó con interesantísimas propuestas, que agrupadas dentro de la Comunidad Yatay y con la autogestión como bandera, generaron un cambio generacional así como también una revitalización dentro de la escena musical. De esta cofradía surgieron El Chávez, Shambala y Yicos, quienes fueron protagonistas de “Rayo Cabayo”, una muestra integral, multifacética e interactiva para celebrar el décimo aniversario de las diferentes manifestaciones artísticas que enriquecen la escena cultural de la zona.
Representantes de diferentes ramas del arte exhibieron su trabajo el 4 y 5 de diciembre pasado, en la UGC Nº2 de Haedo. Marielotass, Maca Fatne, Lucía Di Martino, Santiago Capriglione y Pablo Saporiti, fueron algunos de los expositores, mientras que el show musical se nutrió con la participación de algunos destacados exponentes del Oeste, entre ellos Juanito El Cantor, quien fue el primero en pisar el escenario para interpretar temas de su fantástico disco «12 canciones de amor y una botella de vino». Juan Ignacio Serrano comenzó con “El vals de la juguetería” para continuar con “Amarillo” y “Bolero”, en tanto que “Ay mi gorrión” confluyó en la conexión con Doña Maria.
Haciendo honor a su diversidad musical, el sexteto que fusiona el folclore latinoamericano con pasajes de electrónica arrancó con ciertos aires brasileños misturados con la melodía de “La gran bestia pop” de los Redondos para dar paso a “El pescador” y “Plantita de alelí”, con Coiffeur, el alter ego de Guillermo Alonso, quién desplegó su acid folk made in Morón en un repaso por sus diferentes etapas con una clara preponderancia del disco «No es» (2006), del que sonaron “Vuelvas a casa”, “Que mala suerte”, “Parece” y “Los distraídos”.
Cuando empezaba a caer la noche, Shambala destiló los suaves bálsamos del reggae cultural iniciando su set con una balada que expresa el espíritu perseverante y combativo de la banda: “Aquí sigo parado porque mi llama no se ha apagado. La calma será mi motor”, con el ex guitarrista de Demente Caracol, Matías Kocens, como invitado. La banda matrona de la Comunidad Yatay interpretó, además, “Como cabayos” (uno de los temas de esta movida), “Huayno Songko” (con una intro de “Entre a mi hogar” de los Tekis) y “Rebel love” (con Chávez y Sra., la cantante Eugenia Insaurralde)
La mayor ovación de la fecha llegó cuando El Chávez irrumpió en escena con su proyecto en solitario: un cóctel colorido, bailable y explosivo que desplegó temas de su flamante disco «Morón City Groove» como “Rosa Maria”, “San Genaro” y “Non stop” (reversión de “Que la música no pare”) y dos joyitas de Nuca, “Maquina de la pampa” y “Situación” con Fer Redl y Pato Debritos de Yicos como invitados. Y justamente el poderoso septeto cerró la jornada con un repertorio que se basó en sus dos discos “Siempre mejor” y “Feliz” de «Bombo Clap» (2002), y “En la noche” y “Charcos” de «Los Muertitos» (2008), y contó con la participación de Martín Méndez (ex Caballero de la Quema, actual Sendero y productor de la banda). Los Yicos también hicieron “Somos Rayo Cabayo”, otra de las canciones compuestas para este evento.
“Hace 10 años muchos de nosotros comenzamos este camino del arte con mucha emoción y convicción, y hoy, después de 10 años, estamos todos juntos conociendo a las nuevas generaciones y haciendo esto, que nos pareció novedoso e inquietante. Muchas gracias, esto fue Rayo Cabayo”, comentó Fer Radl e invitó a todos los artistas que participaron de la fecha para interpretar la cumbia “Por las calles de Morón”. Un final emotivo e ideal que reflejó lo que fueron estos dos días inolvidables, en los cuales la respuesta del público dejó la puerta abierta para una posible nueva edición.
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Cuando corría el año 2000 en el Oeste surgió una movida artística que contó con interesantísimas propuestas, que agrupadas dentro de la Comunidad Yatay y con la autogestión como bandera, generaron un cambio generacional así como también una revitalización dentro de la escena musical. De esta cofradía surgieron El Chávez, Shambala y Yicos, quienes fueron protagonistas de “Rayo Cabayo”, una muestra integral, multifacética e interactiva para celebrar el décimo aniversario de las diferentes manifestaciones artísticas que enriquecen la escena cultural de la zona.
Representantes de diferentes ramas del arte exhibieron su trabajo el 4 y 5 de diciembre pasado, en la UGC Nº2 de Haedo. Marielotass, Maca Fatne, Lucía Di Martino, Santiago Capriglione y Pablo Saporiti, fueron algunos de los expositores, mientras que el show musical se nutrió con la participación de algunos destacados exponentes del Oeste, entre ellos Juanito El Cantor, quien fue el primero en pisar el escenario para interpretar temas de su fantástico disco «12 canciones de amor y una botella de vino». Juan Ignacio Serrano comenzó con “El vals de la juguetería” para continuar con “Amarillo” y “Bolero”, en tanto que “Ay mi gorrión” confluyó en la conexión con Doña Maria.
Haciendo honor a su diversidad musical, el sexteto que fusiona el folclore latinoamericano con pasajes de electrónica arrancó con ciertos aires brasileños misturados con la melodía de “La gran bestia pop” de los Redondos para dar paso a “El pescador” y “Plantita de alelí”, con Coiffeur, el alter ego de Guillermo Alonso, quién desplegó su acid folk made in Morón en un repaso por sus diferentes etapas con una clara preponderancia del disco «No es» (2006), del que sonaron “Vuelvas a casa”, “Que mala suerte”, “Parece” y “Los distraídos”.
Cuando empezaba a caer la noche, Shambala destiló los suaves bálsamos del reggae cultural iniciando su set con una balada que expresa el espíritu perseverante y combativo de la banda: “Aquí sigo parado porque mi llama no se ha apagado. La calma será mi motor”, con el ex guitarrista de Demente Caracol, Matías Kocens, como invitado. La banda matrona de la Comunidad Yatay interpretó, además, “Como cabayos” (uno de los temas de esta movida), “Huayno Songko” (con una intro de “Entre a mi hogar” de los Tekis) y “Rebel love” (con Chávez y Sra., la cantante Eugenia Insaurralde)
La mayor ovación de la fecha llegó cuando El Chávez irrumpió en escena con su proyecto en solitario: un cóctel colorido, bailable y explosivo que desplegó temas de su flamante disco «Morón City Groove» como “Rosa Maria”, “San Genaro” y “Non stop” (reversión de “Que la música no pare”) y dos joyitas de Nuca, “Maquina de la pampa” y “Situación” con Fer Redl y Pato Debritos de Yicos como invitados. Y justamente el poderoso septeto cerró la jornada con un repertorio que se basó en sus dos discos “Siempre mejor” y “Feliz” de «Bombo Clap» (2002), y “En la noche” y “Charcos” de «Los Muertitos» (2008), y contó con la participación de Martín Méndez (ex Caballero de la Quema, actual Sendero y productor de la banda). Los Yicos también hicieron “Somos Rayo Cabayo”, otra de las canciones compuestas para este evento.
“Hace 10 años muchos de nosotros comenzamos este camino del arte con mucha emoción y convicción, y hoy, después de 10 años, estamos todos juntos conociendo a las nuevas generaciones y haciendo esto, que nos pareció novedoso e inquietante. Muchas gracias, esto fue Rayo Cabayo”, comentó Fer Radl e invitó a todos los artistas que participaron de la fecha para interpretar la cumbia “Por las calles de Morón”. Un final emotivo e ideal que reflejó lo que fueron estos dos días inolvidables, en los cuales la respuesta del público dejó la puerta abierta para una posible nueva edición.
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