Tras la presentación en el Festival Internacional Folklore Buenos Aires, en La Plata , la Peña Eléctrica volvió a Niceto con la actuación central de El vislumbre del esteko.
La cantante Cecilia Wara, transmite alegría con una infranqueable sonrisa y en un andar inquieto suma su charango al sikus y a la quena para confluir en los fieles sonidos del altiplano, mientras invita a un tímido público a aproximarse más cerca del escenario. En vivo, Imperio Diablo logra imprimirle un tono más enérgico a los temas “Rebelión Aymará”, “Brille libre”, “Bailar”, “Diablada” (con la figura del diablo, propio de los rituales paganos de Bolivia, bailando entre los músicos), “Ninia cereza” y “Huay not”, pertenecientes a su homónimo debut discográfico.
Con la habitual cuota de distorsión, el cuarteto comenzó su actuación con “La peñera”, “Cantor del alma” y la versión del tema de los Rolling Stone, “Píntalo de negro”, para luego invitar a Jorgelina y Adrián (profesores de la peña que se lleva a cabo todos los domingos en la catedral de Almagro) a bailar la zamba “Lucecita”.
Por el repertorio de El Vislumbre desfilaron chacareras (“Ricurispa”, “Ckeshu sisa”), alguna zamba (“Amar sin condición”), también incluyó chacarera doble (“Del Dios de la chacarera”), guarachas (“Fiebre de amor”, “Siente bien”) para finalizar con la contestataria vidala – guaracha, “¿Que vas a hacer?”(“Esperar que vuelva un Che Guevara, o nos gobierne un tal Fidel. O que venga un europeo a crear papeleras. Y de mierda por miel”). Pero ese no sería el final de la Peña , era solo el comienzo.
Luego de Chakatap vs Zapateo, Demi Carabajal se hizo presente y anunció que haría “tres chacareras y un gato”, entre las que brillaron “Tata Nachi” de Carlos Carabajal, "Mishquila" de Néstor Garnica, "La simple" (tema conocido también como "Solo pa' bailarla" grabado por Peteco, Mercedes Sosa y Los Nocheros y que forma parte del primer disco de Demi titulado «Bajo el cielo santiagueño»).
Con Tremor en el escenario las nociones tradicionales del folklore se expandieron a límites impensados y la conjunción de beats electrónicos, charango y bombo legüero (marcando el ritmo) transformó a la peña en una rave folklórica. Leonardo Martinelli, líder de este novedoso proyecto, invitó a Bárbara Palacios para interpretar “Chacarera del engaño”, fusionando la cadencia folklórica de Semilla con las texturas electrónicas de Tremor. Finalmente, El vislumbre del esteko volvió a tocar y las chacareras se sucedieron hasta altas horas de la madrugada.
1 comentario:
Me gusta el blog, también me parece una ideal el espíritu crítico y sin ataduras que ustedes comunican. Ya los enlace a mi blog.
Un abrazo desde Córdoba.
Publicar un comentario