Frente a más de 50 mil personas el rosarino cerró el “Festival por la memoria y la vida”, organizado por el Municipio de Morón para conmemorar del 34º aniversario del Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
Galería de fotos
El sábado, en el Polideportivo Gorki Grana, se realizó el Festival por la memoria y la vida con diferentes actividades a lo largo de todo el día: grupo de arte callejero; stands de organismos de derechos humanos; se expuso la muestra fotográfica “Memoria Gráfica”, con fotos pertenecientes a la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina que recorre desde el Cordobazo hasta el Juicio a las juntas Militares; Teatro por la Identidad con la presentación de la obra “Strudel y Guinness”; además se proyectó el documental sobre el centro clandestino de detención “Mansión Seré”; y se realizaron visitas a las excavaciones del Proyecto Mansión Seré para recuperar los cimientos originales del ex centro clandestino de torturas. El cierre estuvo a cargo de Fito Páez.
“Con memoria buscamos verdad y justicia convencidos de que justicia es: que se esclarezcan los crímenes y avancen las investigaciones y las condenas; volver a traer y recuperar esos sueños de los 30.000 desaparecidos y desaparecidas; es poder enfrentar la inequitativa distribución de la riqueza, garantizar justicia social y fortalecer nuestra democracia; es avanzar para revertir la pobreza, la exclusión, los niveles de marginalidad; es que todos puedan comer, tener acceso a la salud, a la educación, a un empleo, a vivir con dignidad”, afirmó el intendente Lucas Ghi durante el acto central.
La actuación de Fito Páez en la ex Mansión Seré comenzó con “Tiempo al tiempo”, un tema perteneciente a su flamante placa «Confía» que será presentada oficialmente el 7 de mayo en el Luna Park, y a partir de ese momento el rosarino arremetió con una andanada de clásicos de su extensa carrera: “El chico de la tapa” y “Fue amor” pertenecientes a «Tercer Mundo» de 1990; “11 y 6”, “Giros” y “Cable a tierra” de «Giros» de 1985. Y dentro de la lista, junto a estas inoxidables joyas, también se filtraron otros temas, que más cercanos en el tiempo, sonaron hasta el hastío en cuanta radio y canal de música, como “Circo Beat”, “Mariposa Tecknicolor”, “El diablo de tu corazón” y “Al lado del camino”.
“Buenas noches a todos. Es una noche especialísima porque donde aparece la vida y estuvo la muerte siempre es una celebración, en la cual estamos aquí presentes para dar prueba de eso. Es muy emocionante para nosotros participar aquí esta noche”, comentó Rodolfo Páez, y presentó la próxima canción: “Chicas bravas aquí y allá. A la más brava del barrio, Polaroid” para instalarse en el disco «Ey» (1988) con “Polaroid de locura ordinaria”.
En el repertorio del rosarino ocupó un lugar especial el exitosísimo «El amor después del amor», el disco más vendido en la historia del rock argentino con 600 mil copias que le permitió al artista instalarse definitivamente en el podio de los solistas nacionales, junto a Luís Alberto Spinetta y Charly García. De ese álbum sonaron: “Un vestido y un amor”, “Tumbas de la gloria”, “Brillante sobre el Mic”, “A rodar la vida”, “La rueda mágica” (con un guiño de Fito para el público del Oeste: “Recuerdo un día como hoy, me fui viajando hasta Morón y no volví nunca más”) y “El amor después del amor” (con Claudia Puyo como invitada).
Como es habitual en este tipo de eventos, Lucas Ghi - el intendente de Morón - junto a Martín Sabbatella -fundador de la Casa de la Memoria y la Vida- le entregaron a Fito Páez la distinción de Visitante Ilustre de Morón. Y los bises llegaron de la mano de una corrosiva versión de “Ciudad de pobres corazones” (en la que la banda realizó una vehemente zapaba, mientras Fito – con cigarrillo en mano - observó el desempeño de su nueva formación con un gesto de aprobación), y la armoniosa “Dar es dar” puso fin a un espectacular show que ratificó la vigencia de un artista tan versátil como talentoso.
Videos
- Giros
- Polaroid de locura ordinaria
- Naturaleza Sangre
- Cable a tierra
- El amor después del amor
- Ciudad de pobres corazones
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El sábado, en el Polideportivo Gorki Grana, se realizó el Festival por la memoria y la vida con diferentes actividades a lo largo de todo el día: grupo de arte callejero; stands de organismos de derechos humanos; se expuso la muestra fotográfica “Memoria Gráfica”, con fotos pertenecientes a la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina que recorre desde el Cordobazo hasta el Juicio a las juntas Militares; Teatro por la Identidad con la presentación de la obra “Strudel y Guinness”; además se proyectó el documental sobre el centro clandestino de detención “Mansión Seré”; y se realizaron visitas a las excavaciones del Proyecto Mansión Seré para recuperar los cimientos originales del ex centro clandestino de torturas. El cierre estuvo a cargo de Fito Páez.
“Con memoria buscamos verdad y justicia convencidos de que justicia es: que se esclarezcan los crímenes y avancen las investigaciones y las condenas; volver a traer y recuperar esos sueños de los 30.000 desaparecidos y desaparecidas; es poder enfrentar la inequitativa distribución de la riqueza, garantizar justicia social y fortalecer nuestra democracia; es avanzar para revertir la pobreza, la exclusión, los niveles de marginalidad; es que todos puedan comer, tener acceso a la salud, a la educación, a un empleo, a vivir con dignidad”, afirmó el intendente Lucas Ghi durante el acto central.
La actuación de Fito Páez en la ex Mansión Seré comenzó con “Tiempo al tiempo”, un tema perteneciente a su flamante placa «Confía» que será presentada oficialmente el 7 de mayo en el Luna Park, y a partir de ese momento el rosarino arremetió con una andanada de clásicos de su extensa carrera: “El chico de la tapa” y “Fue amor” pertenecientes a «Tercer Mundo» de 1990; “11 y 6”, “Giros” y “Cable a tierra” de «Giros» de 1985. Y dentro de la lista, junto a estas inoxidables joyas, también se filtraron otros temas, que más cercanos en el tiempo, sonaron hasta el hastío en cuanta radio y canal de música, como “Circo Beat”, “Mariposa Tecknicolor”, “El diablo de tu corazón” y “Al lado del camino”.
“Buenas noches a todos. Es una noche especialísima porque donde aparece la vida y estuvo la muerte siempre es una celebración, en la cual estamos aquí presentes para dar prueba de eso. Es muy emocionante para nosotros participar aquí esta noche”, comentó Rodolfo Páez, y presentó la próxima canción: “Chicas bravas aquí y allá. A la más brava del barrio, Polaroid” para instalarse en el disco «Ey» (1988) con “Polaroid de locura ordinaria”.
En el repertorio del rosarino ocupó un lugar especial el exitosísimo «El amor después del amor», el disco más vendido en la historia del rock argentino con 600 mil copias que le permitió al artista instalarse definitivamente en el podio de los solistas nacionales, junto a Luís Alberto Spinetta y Charly García. De ese álbum sonaron: “Un vestido y un amor”, “Tumbas de la gloria”, “Brillante sobre el Mic”, “A rodar la vida”, “La rueda mágica” (con un guiño de Fito para el público del Oeste: “Recuerdo un día como hoy, me fui viajando hasta Morón y no volví nunca más”) y “El amor después del amor” (con Claudia Puyo como invitada).
Como es habitual en este tipo de eventos, Lucas Ghi - el intendente de Morón - junto a Martín Sabbatella -fundador de la Casa de la Memoria y la Vida- le entregaron a Fito Páez la distinción de Visitante Ilustre de Morón. Y los bises llegaron de la mano de una corrosiva versión de “Ciudad de pobres corazones” (en la que la banda realizó una vehemente zapaba, mientras Fito – con cigarrillo en mano - observó el desempeño de su nueva formación con un gesto de aprobación), y la armoniosa “Dar es dar” puso fin a un espectacular show que ratificó la vigencia de un artista tan versátil como talentoso.
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1 comentario:
estoy buscando un video de esa noche de DAR es DAR juanarebalo@hotmail.com
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